Perfiles de Playa
🌊Perfiles de playa.🌊
Los cambios en la morfología de las playas se
deben fundamentalmente a la hidrodinámica de la región y a las características
de los sedimentos. Parámetros como la altura, dirección y periodo del oleaje, así
como la amplitud de la marea, combinados con la densidad, tamaño medio, grado
de selección y velocidad de caída de los granos de arena son factores que
determinan la morfodinámica de las playas (Caravaca, et al., 2015).
EL levantamiento de perfiles
perpendiculares a la línea de costa es una herramienta importante para monitorear la evolución de la misma
(Taaouati, et al., 2020), ya que permiten reconstruir la morfología de la región,
así como inferir el volumen de sedimento que es erosionado o depositado en un
determinado tiempo (Serrano, et al, 2009).
Las variaciones morfológicas a
largo plazo en la playa pueden estar asociadas a un balance sedimentario en
equilibrio, o bien mostrar comportamiento de acumulación o erosión neta. La mayoría
de las playas presentan de manera natural un comportamiento cíclico estacional de
acumulación y erosión (Caravaca, et al., 2015).
Para este trabajo, en la barra de arena de la Carbonera, Sisal, Yucatán, se levantaron 6
perfiles perpendiculares a la línea de costa, con una distancia entre cada perfil
de 200 m, aproximadamente. Todos durante el mes de marzo de 2020.
Primer Perfil tomado en la punta de la barra de arena. Con una altura mínima de 1.46 m y una altura máxima de 2.8m. |
Segundo Perfil tomado a 200 m de la punta de la barra de arena. Con una altura mínima de 0.010 m y una altura máxima de 1.64 m. |
Cuarto Perfil tomado a 400 m de la punta de la barra de arena.
Con una altura mínima de 1.1 m y una altura máxima de 2.8 m. |
Quinto Perfil tomado a 500 m de la punta de la barra de arena. Con una altura mínima de -2.1 m y una altura máxima de 1.39 m. |
Sexto Perfil tomado a 600 m de la punta de la barra de arena. Con una altura mínima de 0.24 m y una altura máxima de 1.51 m. |
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Taaouati, et al (2020) recomiendan comparar perfiles de playa de una misma costa de al menos dos años, esto con el objetivo de obtener conclusiones significativas sobre el comportamiento morfológico de las playas. Para el caso de nuestro estudio, por condiciones ajenas a la intensión del proyecto solo se pudo realizar el muestreo una vez, por lo tanto no se muestran comparaciones temporales.
Comprender la respuesta de las playas a las variaciones en las condiciones de energía de las olas, las mareas, las tormentas y otros factores en diferentes escalas de tiempo es un requisito mínimo para proyectos y prácticas de gestión. Esto resulta especialmente importante a escala regional, donde se toman decisiones de manejo costero y se requiere un mejor conocimiento científico (Esteves, et al., 2006)